No todos tenemos el mismo grado de evolución; pues “evolución” se refiere a nuestro crecimiento espiritual, no al nivel social que tengamos ni a la inteligencia, creatividad, educación, ni instrucción, etc. Está la esfera de la “conciencia del YO” o de la “conciencia humana”, donde cada ser se ve a sí mismo como distinto de los demás seres. Y también la esfera de la “conciencia del UNO” o “conciencia Divina” donde la conciencia individual desaparece, identificándose con la conciencia del Universo.
En los primitivos humanos la primera conciencia de comunidad que aparece es la “familiar”, luego viene la “conciencia tribal o de la toldería”, seguimos con “mi pueblo natal”, después poco a poco entra la “conciencia regional”, que puede referirse al país, la provincia o simplemente a una región, (en mi caso yo suelo decir: – Yo vivo en el sur, donde el paisaje es soñado en cualquier época del año).
El “nacionalismo”, es ese sentimiento donde se funden todas las conciencias regionales, es el actual nivel de conciencia que prevalece en estos tiempos, pero que ya tiende a desvanecerse pues ya está llegando la “conciencia Continental” y pueda ser que luego venga la “conciencia Universal” que estará limitada a este planeta. Ya en Europa tenemos la llamada “comunidad europea”, en los demás continentes se irá haciendo lo mismo, hasta que llegue un tiempo en que todas las barreras raciales, ideológicas, económicas y sociales desaparezcan.
Allí toda la humanidad podrá sentirse como hija de una misma madre, que sería la “Pachamama” de los Incas, quienes igual que los Aztecas, los Egipcios y los Hindúes, son las últimas ramas dispersas de la raza Atlante, que es la inmediatamente anterior a nuestra raza Ariana. Acá, no puedo dejar de sonreírme al pensar que por ahora nos resulta inimaginable pensar que quizás lleguen los tiempos en que nos relacionemos con seres de otros planetas y queramos enterarnos de qué razas se fueron dando allí.
La manera de comer de una sociedad también tiene que ver con el grado de evolución de la conciencia de ese pueblo. En el libro de E. Soriani leí lo siguiente: -“Al disponernos a comer, quien recibe el primer impacto es nuestro cuerpo Etérico, que responderá con la carga bio-eléctrica contraria a la del alimento que comamos, trasmitiéndola a las glándulas de secreción interna y a los órganos digestivos para que la digestión se cumpla perfectamente.
La anatomía de nuestro sistema digestivo nos demuestra que no tenemos la organización necesaria para digerir la carne. ¿Y por qué será que una gran mayoría de los humanos hace de la carne su principal alimento? Hay poderosos intereses financieros tras la carne. En el hombre, la carne más que actuar como alimento, actúa como un estimulante. Tal como lo hace el vino, el cigarrillo, y las diferentes maneras de drogarse… ¡Los remedios y los laboratorios son el otro gran negocio de las multinacionales!
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