Estuve en un taller sobre el tema en general, y como mi Biotipo predominante es Vata, comprendí que en la tercera edad se acentúa esta tipología en todos , y que los de Vata serían los que más tienden a desequilibrarse. Allí empecé a ver más claramente lo que me estaba pasando, y cómo el auto-conocimiento ayudaría muchísimo a todos los adultos mayores a buscar los recursos necesarios y también a aceptar sus características.
Ayer fui a visitar a un vecino sexagenario, que tuvo un ACV y que estuvo anímicamente muy mal ante esa situación. Me contó que él ya sabía que su colesterol estaba alto, que su presión también era alta, que tenía sobrepeso, y que eso era una situación de gran riesgo, pero no le daba mayor importancia, y seguía disfrutando de la vida… Hasta que el problema lo tiró totalmente abajo, y se pasó un año sin saber qué rumbo tomar…, “un año en blanco”, como él lo denominó. “Había perdido todas las fuerzas y lo único que me interesaba era dormir…,” –y me siguió contando. “Hasta que de pronto, de repente, dije: Ya no tengo ganas ni energía para nada, esto es “Depresión”, allí agarré un palo, y salí a caminar…”
Al verlo ayer me encontré con un hombre sumamente amable, tranquilo y sonriente… todos datos que me hablaban de su actual bienestar, y que además de ocuparse de sí mismo, de sus plantas, y sus gallinas, hacía una artesanía en madera muy bonita. Allí yo solamente aporté: “tu alma te venía hablando, pero vos no escuchabas, hasta que de repente: ¡La escuchaste! Ese es un momento muy importante en la vida de todos, cuando por fin la escuchamos y aceptamos cambiar…”
Ahora dejo ese tema, y hablo de mí, ya siendo octogenaria. ¿Cómo estoy viviendo mi propio otoño? Encuentro que es una etapa muy colorida, con muchas oportunidades de sentir la libertad interior, de continuar aprendiendo, de seguir compartiendo eso que esencialmente somos: ¡Amor!, ¡Conocimiento!, Paz y ¡Alegría!
También encuentro que por momentos me cuesta aceptar la caída de mis hojas: fuerza muscular, debilidad en ciertos órganos… memoria… etc. Todavía soy una agradecida por todo lo que aún me queda… pero estoy necesitando más práctica de SOLTAR, y SOLTAR, y soltar… Comprendo que al predominar “Vata” en mi constitución física, mental y emocional, traigo ya ciertas debilidades a trabajar y cierto potencial a desarrollar, pero lo primero siempre será aceptarme y amarme así cómo esté siendo… porque vendrán muchos cambios, rápidos, sorpresivos, (así es el otoño…), llueve, sale el sol, hay viento, hace frío, ahora hace calor… es toda una preparación para el invierno que también llegará muy helado o más benigno, no lo sabemos… Como “Vata” que soy valoro ese querer seguir aprendiendo para poder seguir disfrutando de la vida, en cada situación que me toque vivir.
13 junio, 2019 a las 12:05 pm
Muy interesante los comentarios del OTOÑO de nuestras vidas; el aceptarlo tal cual viene aligera nuestras angustias por dejar este jardín.
7 mayo, 2019 a las 5:38 am
Me gusta leer a esa Vata otoñal.Gracias..!
7 mayo, 2019 a las 5:05 pm
Me gusta que puedas participar de estos movimientos en pro de la evolución humana. Gracias